"Cuerpo
encargado de velar por el mantenimiento del orden público y la seguridad de los
ciudadanos, a las órdenes de las autoridades
políticas".
Así define la
Real Academia de la Lengua Española a la policía. Curioso es como dicen, que se
dedican a defender a los ciudadanos a las órdenes de las autoridades políticas.
Pero, ¿qué pasa cuando se enfrentan los intereses de las autoridades políticas y
de la ciudadanía? Uno de los más claros ejemplos son los disturbios en el barrio
burgalés de Gamonal, donde se enfrentaban los intereses del pueblo y el de los
políticos o caciques locales de la ciudad. Todos sabemos de lado de quien se
puso la policía… Casi medio centenar de detenidos burgaleses, ninguno era un
político, o gran empresario.
Que la
policía agreda o amenaza a la mínima no nos sorprende a ninguno, lo que quizás
es más curioso y menos gente sabe, es como los antidisturbios o policías en
general, a la hora de cargar, no llevan el número de placa. Pero, claro, nunca
veréis eso salir en un medio de comunicación.
Para observar
represión policial o injusticias del estilo no tenéis que iros muy lejos o
buscar acciones muy puntuales, basta con ir a algunos estadios de fútbol cada
domingo. Os pondré un ejemplo que me sucedió este pasado sábado 25 de enero,
partido que enfrentaba al C.D. Mirandés y al Real Zaragoza C.D. Como
zaragocista que soy acompañé al equipo en este desplazamiento. Las horas previas
al partido se desarrollaron sin ningún incidente, ambas aficiones estuvimos
juntas en determinados bares y hubo un ambiente festivo, como merecía la
ocasión. En el momento de entrar a la zona visitante en torno a 20 policías
custodiaban la puerta 5, de acceso al fondo donde situaban a la grada visitante.
Antes de entrar, lo de siempre, un cacheo con empujones, y algún que otro
insulto y descalificación por parte del CNP. Una vez dentro, tras muchas
amenazas de que nos echarían del campo sino nos quedábamos quietos en un sitio,
conseguimos situarnos con el resto de la peña de la que formábamos parte. El
partido transcurrió con normalidad, casi echan a más de uno por estar sin
camiseta, algo que no sorprende ya.
La
patética actuación de la policía ocurrió con el gol del Real Zaragoza, donde
tras abrazos, empujones etc un aficionado cayó al césped, naturalmente de forma
accidental. Mientras le ayudábamos a subir de nuevo a la grada unos 7 u 8
policías se acercaron corriendo y tras agarrarme del cuello me dijeron: ‘Te voy
a reventar la cabeza, hijo de puta.’ ‘Te vamos a echar de aquí de una patada en
culo, subnormal.’ Supongo que estos insultos vinieron a raíz de que creyeron que
yo era el aficionado que se cayó accidentalmente al terreno de juego. Gracias a
la intervención de aficionados zaragocistas lograron separar a la
policía.
Con esto
quiero invitar a reflexionar. Antes del partido ambas aficiones pasamos un
agradable rato juntos, dentro de la grada nos comportamos de forma normal, pero
por el contrario la policía agredió a más de un aficionado, ¿por qué? Eso me
pregunto yo.
Hay momentos
en que se enfrenta el pueblo a políticos, banqueros y demás opresores, ahí todos
sabemos que la policía va contra el pueblo, pero, ¿por qué en estos casos la
policía lleva a cabo este tipo de represiones? Quizás no os deis cuenta pero
muchísimos altercados y problemas vienen motivados por actuaciones policiales,
simple y llanamente.
Supongo que
ni es necesario decir que ninguno de los policías de Miranda de Ebro llevaba el
número de placa en el uniforme.
http://eloccidental.es/index.php/opinion/item/3369-la-policia-nos-protege