Cuando se habla de fútbol se suele hablar de los mismos jugadores de siempre, lo que nos lleva a preguntarnos que hubiera sido de esas grandes estrellas si se hubieran quedado en los clubes de sus amores ayudandolos a ser grandes en detrimento de sus propias carreras.
Gigi Riva así lo hizo, jugó toda su vida profesional en el mismo club, llevándolo a glorias inmpensables para un club como el Cagliari rechazando siempre fichar por los clubes ricos de Italia. Por su fidelidad es una verdadera leyenda en Cerdeña y por su talento uno de los mejores delanteros italianos de todos los tiempos.
Luigi "Gigi" Riva inició su carrera futbolística en el Legnano de la Serie C en 1962 y llega al Cagliari al año siguiente. En su debut ayudo a conseguir el primer ascenso en la historia del club a la Serie A. El estreno del equipo en la Serie A fue realmente bueno logrando un sexto puesto en la 64/65, a partir de allí el Cagliari iba a seguir creciendo.
En la 66/67 repite el sexto puesto y Riva logra su primer titulo de Capocannonieri con 18 goles. En la 68/69 termina segundo a cuatro puntos de la Fiorentina que fue la campeona y además es subcampeón de la Copa de Italia, Riva se vuelve a proclamar máximo goleador de la Serie A con 20 tantos.
Por fin en la temporada 1969/70 el Cagliari se proclama campeón de Liga, lo hace a falta de dos jornadas venciendo en casa por 2-0 al Bari. Al final de la liga aventaja en cuatro puntos al Inter, pierde solo dos partidos y encaja once tantos en 30 jornadas, 42 son los goles marcados por el equipo de ellos la mitad obra de Riva que se proclama por tercera vez y última máximo goleador. En ese equipo además de Riva había grandes jugadores como el portero Albertosi, Cera, Gori, Niccolai y Domenghini, todos ellos integrantes de la selección italiana que llego a la final del Mundial de Mexico 70 y que perdió ante la mejor selección brasileña de la historia, en ese Mundial Riva anoto tres goles incluido uno en la legendaria semifinal contra la RFA. Otro jugador clave en ese equipo fue el brasileño Nené que llego en 1964 procedente de la Juventus y permaneció hasta 1976. El entrenador del Cagliari esa temporada fue Manlio Scopigno que abandono el club en 1972.
Su aventura en la Copa de Europa la temporada siguiente fue bastante corta, en primera ronda elimino al Saint Etienne por un global de 3-1 pero en octavos de final fue eliminado por el Atlético de Madrid, el partido de ida disputado en Cerdeña concluyo con un 2-1 que fue remontado sin problemas por los colchoneros en el Vicente Calderón con un contundente 3-0 ante un Cagliari donde no pudo jugar Riva por lesión.
En las tres siguientes temporada el Cagliari termino en la zona media-alta de la tabla, séptimo en la 70/71, cuarto en la 71/72 (con 21 goles de Riva) y octavo en la 72/73, esa temporada cayeron en primera ronda de la Copa de la Uefa ante el Olympiakos. Dos decimos puestos en la 73/74 y 74/75 con la marcha de varios jugadores claves como Albertosi, Cera o Gori anunciaban peores tiempos para el equipo sardo.En la temporada 1975/76 se consumo el desastre con el descenso a la Serie B, esa fue la última temporada de Riva en el Cagliari y en el fútbol activo, Riva se lesiono de gravedad y solo pudo jugar 15 partidos anotando 6 goles, aunque lo intento ya no pudo volver a jugar después de esa maldita lesión.
No fue la despedida que se merecía uno de los mejores delanteros italianos de siempre y que fue segundo en las votaciones del balón de oro de 1969 por detrás de Gianni Rivera que era su compañero y gran rival en la selección italiana y tercero en la de 1970 tras Torpedo Muller y Bobby Moore, además se proclamo campeón de la Eurocopa de 1968 marcando un gol en la final ante Yugoslavia.
Esta es la historia de un jugador que si jugar en los grandes equipos de Italia sigue siendo con 35 goles en 42 partidos el máximo goleador de la historia de la selección italiana de fútbol, que fue campeón de la Eurocopa y subcampeón mundialista. Un jugador que ganó el scudetto con un club que nunca había jugado en serie A, un delantero que fue Capocannoniere en 3 ocasiones en la díficil liga Italiana pero sobre todo un hombre que antepuso el equipo de sus amores a la gloria personal y al dinero.
HONOR A GIGI RIVA.
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